Una visión única de un Digital Continent gracias a la economía digital africana y a las redes de trabajo en las que están inmersos los trabajadores africanos

El profesor Mark Graham y el Dr. Mohammad Amir Anwar publican su libro “The Digital Continent: Placing Africa in Planetary Networks of Work”, que examina las implicaciones de la calidad del trabajo digital para la vida y el sustento de los trabajadores africanos, desde Lagos hasta Johannesburgo y Nairobi.

A principios de la década de 2010, había más usuarios de Internet en países como Francia o Alemania que en toda África junta. Pero muchas cosas cambiaron en esa década, y 2018 marcó el primer año en la historia de la humanidad en el que la mayoría de la población mundial está conectada a internet.

Esta conectividad masiva significa que tenemos un internet que ya no conecta solo a los ricos del mundo. Los trabajadores de Lagos, Johannesburgo y Nairobi, y de cualquier otro lugar, pueden ahora solicitar y realizar trabajos procedentes de clientes que pueden estar situados en cualquier parte del mundo. Las empresas de subcontratación digital también pueden ahora establecer operaciones en los lugares más inverosímiles para aprovechar fuerzas laborales hasta ahora desconectadas.

África solía ser el continente menos conectado del mundo, pero con la rápida difusión de la conectividad digital millones de africanos pueden ahora trabajar para clientes y empresas de todo el mundo. Este libro explora los tipos de trabajo que llegan a África y se pregunta cómo viven ese trabajo los trabajadores africanos.

Aporta una visión única de la emergente economía digital en África y de las redes planetarias de trabajo en las que están inmersos los trabajadores africanos.

Con los directores ejecutivos del Norte Global proclamando que la localización es una preocupación del pasado, y los gobiernos y la sociedad civil de África prometiendo crear millones de puestos de trabajo en el continente, El Continente Digital investiga lo que este nuevo mundo del trabajo digital significa para la vida de los trabajadores africanos.

Anwar y Graham se basan en un estudio de campo de cinco años de duración en Sudáfrica, Kenia, Nigeria, Ghana y Uganda, y en más de 200 entrevistas realizadas a participantes, entre los que se encuentran trabajadores de gigas, trabajadores de centros de llamadas y de contacto, pequeños autónomos, propietarios de empresas, funcionarios gubernamentales, funcionarios de sindicatos y expertos del sector. Centrándose en el trabajo a distancia basado en plataformas y en el trabajo en centros de llamadas y de contacto, el libro examina las implicaciones de la calidad del trabajo digital para las vidas y los medios de subsistencia de los trabajadores africanos.