TikTok, Ciberbalcanización y las BigTech
El culebrón de TikTok
Es algo más que una mera guerra comercial entre Trump y China. La amenaza de prohibición de TikTok y de otras apps chinas como WeChat se enmarca en lo que Mike Pompeo llama tener una Internet Limpia.
El hecho que TikTok sea en estos momentos el foco de atención pone de manifiesto que lo que preocupa a la administración Trump es el proceso de sinización, pero sobre todo el control de los datos que se generan con el uso de la aplicación. Por lo tanto, obligar a ByteDance (propietaria de TikTok) a que sea comprada por Microsoft o Twitter implicaría una nacionalización de los datos y un control de lo que hacen sus usuarios.
No es solo TikTok, también WeChat
Cuando Pompeo habla de una “Internet Limpia” se refiere a una Internet libre de influencias Chinas y para ello quiere que la prohibición de TikTok sea extensible a otras aplicaciones como WeChat.
Pero prohibir WeChat implica dejar a más de 20 millones de personas que lo usan diariamente en EEUU sin el canal con el que comunicarse con sus familias, amigos y negocios que están en China. La repercusión puede ser tan grande que empresas como WalMart, Disney o Apple se han reunido con la Casa Blanca para hablar sobre el tema.
Ciberbalcanización y apagones de Internet
Ya hemos hablado anteriormente de este problema, de la ciberbalcanización. China es el primer país en querer una internet propia totalmente controlada, Rusia ya ha hecho sus propias pruebas y con lo que está sucediendo en EEUU pronto veremos diferentes realidades dependiendo de la Internet a la que nos asomemos. Eso si podemos hacerlo, ya que los apagones de Internet se hacen más frecuentes. El último el que han provocado las autoridades en Bielorrusia por la victoria de Lukashenko.
La conclusión que podemos sacar de todo esto es que finalmente la administración Trump se ha rendido a la visión que tiene China de Internet.
Las BigTech y las elecciones en EEUU
Retrocedamos un poco en el tiempo. No hace demasiado, unos pocos meses, la mayoría de candidatos demócratas a la nominación encabezados por Elisabeth Warren querían que las BigTech fueran “seccionadas” para evitar que acumularan tanto poder. Meses más tarde la candidata a Vicepresidenta es Kamala Harris, que en su momento no secundó la propuesta de Warren.
Otro elemento a tener en cuenta es el papel que desempeñan en la lucha contra la desinformación. De nuevo las redes rusas y chinas se han puesto en marcha, cada una de ellas apostando por un caballo ganador y las plataformas sociales se convierten en policías de contenido. Pero no solo de lo que pueda llegar de estas inferencias extranjeras, sino también de lo que se pueda publicar internamente. Y aquí es dónde Trump adquiere protagonismo. En más de una ocasión se le ha etiquetado algún contenido como “dudoso” o incluso se le ha obligado a retirarlo por “desinformar”. Esta situación ha revertido en victimismo alegando que limitan la libertad de expresión, llegando incluso a amenazar a dichas plataformas si no tienen más manga ancha.
Por lo tanto, se presenta un panorama interesante y una situación complicada al papel que las BigTech si quieren asegurar imparcialidad y un voto informado.
Tenéis más información sobre este tema en el artículo de Antoni Gutiérrez-Rubí “El papel de las BigTech en las elecciones presidenciales de EEUU“.